sábado, 4 de octubre de 2008

Lobo Estepario


Este es el Aeropuerto de Cancún, y este su cielo y yo como Lobo Estepario, acechando la noche, en espera siempre de algo. He observado como se hacen las redes humanas de amistades. Pareciera ser que las hay de dos tipos, la primera es sobre egos o particularidades, parejas, hijos, fiestas y cosas cotidianas que al final de todas maneras son las redes que te apoyan en momentos difíciles o te conectan al trabajo, pero de las cuales suelo huir de manera instintiva, no entiendo su dinámica, aunque reconozco su eficacia y sus efectos. La otra red, tiene que ver con amistades que se hacen a base de un objetivo común como el enfoque en el trabajo o porque están interesados en algo en particular, digamos como un club de amigos, de alguna manera funcionan como la primera red, pero en este caso se reúnen a partir del objetivo que los une, tampoco me suscribo a ningún club, aunque para mí esta red es más entendible que la primera. Generalmente suelo ser un lobo estepario y me desenvuelvo mucho mejor con un buen café y una charla íntima con un amigo o amiga, las fiestas y las reuniones en donde todos se reúnen no me son gratificantes, generalmente me suele gustar la soledad, en donde se desarrolla mi creatividad o la charla tete a tete. Definitivamente soy gregaria como cualquier especimen humano pero como los pandas o los lobos de la estepa disfruto la gracia de la soledad.